Sube la temperatura
Capítulo 10
*Lo primero de todo, lo siento muchísimo por no poder haber subido el capítulo a su hora, pero he tenido visitas y bueno, pues lo típico, hay que estar con ellos, que si no queda feo y bueno, son mis primos y me llevo genial con ellos. Si algún día no subo no pensáis que es porque no lo tengo escrito, porque tengo la novela muy muy avanzada, en todo caso sería por algún problema. De verdad que lo siento, acabo de coger el ordenador ahora mismo y lo primero que he hecho es subiros el capítulo de hoy. Espero que os guste, ¡gracias por leer!*
- Y como yo estoy contento, me gusta mantener contento a la chica así que te he traído esto.- dijo con una sonrisa de oreja a oreja.
De detrás de su espalda salieron unas preciosas rosas blancas. Un ramo bien colocado, un papel trasparente y con un lazo en amarillo sujetando las rosas.
- El color blanco tiene un significado.- dijo Mats guiñándome un ojo.
- ¿Y cuál es?- pregunté curiosa.
- Si regalas rosas de color blanco significa que quieres formar una pareja estable con esa persona, significan pureza por lo tanto si representan el amor significa amor puro y felicidad.- dijo susurrando en mi oído.
- Así que el señor Mats quiere formar una pareja estable conmigo.- dije.
- Acertaste, señorita Laia, pero tómate el tiempo para decidir.- dijo él.
- Así que me estás proponiendo salir…- dije.
- Sí, pero sin presiones.- dijo él sonriendo.
- Bien, señor Mats, usted y yo tenemos una apuesta. Si usted junto con su equipo gana el Mundial me voy de vacaciones con él y a vivir a Dortmund, pero en ningún momento dijo nada de salir, así que yo le añado esta apuesta que si usted gana el Mundial, tendremos una relación.- dije con una sonrisita.
- ¡Qué formal!- dijo riendo.- ¿Y mientras que haremos?- preguntó él.
- Citas, señor Mats, pero siento decirle que ahora tengo que pasar a limpio una entrevista y entregarla.- dije sonriente.
Terminé mi coca-cola, besé a Mats en la mejilla.
- Así que te acuestas conmigo, pero te despides con un beso en la mejilla.- dijo Mats cruzándose de brazos.
Me acerqué a él y sonreí. Estaba sentado en un taburete y yo de pie, como él era más alto, ahora estábamos a la misma altura.
- Así que quiere un beso, pero no en la mejilla, señor Mats.- dije provocativa.
Mats posó su mano en la parte baja de mi espalda. Besé sus labios, pausadamente, con pasión.
- Adiós, señor Mats.- dije riendo.
Narra Mats:
La observé marcharse del lugar como lo había hecho días antes. Me seguía pareciendo una modelo. Ni siquiera ella sabe que lo parece, lo hace sin más, le sale solo y eso le hace especial. También sabe cuando ser provocativa y lo hace muy bien. Me ha besado, esta vez no he sido yo el que se ha lanzado, ha sido ella, provocativa, seductora y besa perfectamente. Sabe como volverme loco.
Había conseguido que ella añadiese a la apuesta empezar una relación y antes tendríamos citas. Si ya tenía ventaja sabiendo que se vendría de vacaciones y a vivir conmigo a Dortmund para poder conquistarla, si ya sumábamos que tenía que empezar una relación conmigo y tener citas, sería fantástico para poder conquistarla.
Narra Laia:
Llegué al hotel y me estaba esperando Natalia, cuando vio las rosas empezó a aplaudir y chillar.
- Tranquilízate Natalia.- le dije en un tono de voz bajo.- Nos está mirando todo el mundo.- dije intentando calmarla.
- ¿Te las ha regalado él?- dijo incrédula.
- Sí.- respondí emocionada.- Además, me dijo que el color blanco significaba que quería tener una relación estable conmigo, también pureza y si significan amor y pureza, es un amor puro y felicidad.- dije sonriendo como una tonta.
- ¿Te ha propuesto salir con él?- dijo Natalia en un gritito.
- Tranquila, Natalia.- dije, hice una pausa.- Sí, pero me ha dicho que con calma, sin presiones, que decida con tiempo.- dije, volví a hacer otra pausa.- Y he añadido a la apuesta que si gana el Mundial empezaré a tener una relación con él además de irme de vacaciones con él y a vivir a Dortmund con él.- dije emocionada.
- Se te nota emocionada, no lo niegues. Te han encantado las rosas.- dijo ella.- ¿Y bueno antes tendréis citas?- dijo casi tan emocionada como yo.
- ¡Sí!- exclamé.
- Mats Hummels te hace tilín.- dijo ella riendo.- Y le has besado.
- Natalia… No le he besado.- dije yo.
- Te hace tilín, estás pillada, te gusta, estás enamorada y me puedo tirar así todo el día así que admítelo.- dijo Natalia.- Y sí le has besado.
- No sé, cuando vayamos teniendo citas, te cuento.- dije.- ¿Se nota mucho?- pregunté.
- No puedes esconder lo que sientes por más tiempo, se te va viendo el plumero.- dijo Natalia guiñando un ojo, hizo una pausa.- Arréglate el pintalabios.
- Voy a pasar esta entrevista a limpio y a entregarla.- le dije a Natalia, hice una pausa.- Y a arreglarme el pintalabios.- dije riendo por esto último.
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