martes, 30 de septiembre de 2014



¡Y ahora os traigo el post de fotos y de gifs!

Fotos de Mats y Laia:



Fotos de Mats:







Gif de Mats y Laia:


Gifs de Mats:





                        Sube la temperatura

                                           Capítulo 46

*¡Holaaa! Siento subir tarde pero la biología es kk y me entretiene demasiado y asquerosidad los deberes que mandan :c ¡Espero que os guste! Disfrutaaaar y ahora os subo post de gifs y fotos. ¡Gracias por leer!*

Narra Laia:

Empecé a recoger la mesa, mis padres también y fuimos juntos a la cocina. Marta, Jesús y Mats se quedaron en el salón.

- Es simpático y se le ve buen chico.- dijo mi madre dejando varios platos en el fregadero.

- No me gusta.- dijo mi padre, hizo lo mismo que mi madre.

- ¿Pero por qué?- pregunté.

- Te quiere llevar a Dortmund así porque sí.- respondió él.

- ¡Me quiere! ¡Y no vais a volverme a comer la cabeza como con Miguel! Quiero a Mats y sé que él no me va a fallar. Si pasa algo, tengo dinero para volver.- dije.

- ¿Y.. y si te pega?- preguntó mi madre.

- No puedo vivir toda mi vida con el miedo en el cuerpo. Lo he superado y vosotros deberíais ir superándolo. No todos son como Javier. Mats tiene los pies en el suelo.- me crucé de brazos.

- Javier los tenía…- dijo mi madre.

- Pero a Mats no le pasará lo mismo.- dije.

- No te vayas, por favor.- dijo mi padre.

- Es un riesgo que debo correr, papá.- dije.

- Te apoyaremos.- dijo mi madre.

Mi padre finalmente cedió.

Narra Mats:

Estaba más nervioso ya que Laia me había dejado a solas con su hermana y su cuñado.

- Oye, Mats. Cuídala bien, por favor. Mis padres se preocuparán muchísimo por ella.- dijo Marta.

- No te preocupes, la voy a cuidar muy bien y ella siempre tiene la opción de volver si no se encuentra a gusto en Dortmund. No tengo ningún problema con ello.- dije sonriendo.

- Pareces un buen tío.- dijo Jesús.

Sonreí.

Laia volvió de la cocina y traía tarta de fresa.

- La tarta de fresa es la favorita de mi hermana y a mi también me gusta así que mis padres la compraron.- dijo Laia relamiéndose.

Todos reímos.

- Les has caído bien.- dijo Laia soltando su bolso cuando llegamos a casa y quitándose los tacones.- Pero siguen con el temor en el cuerpo.- dijo ella apenada.

- Les haré ver que conmigo no tienen nada que temer.- dije

Rodee a Laia con mis brazos, me arrimé a ella y besé su cuello. Ella rió.

- No puedo resistirme a Mats Hummels.- dijo ella riendo.

Le guiñé un ojo. Seguí besando su cuello. Fuimos caminando poco a poco hasta su habitación. Su piso era amplio. Entrabas y tenías el salón con una bonita terraza, desde donde ella vivía se veía gran parte de Madrid. Tenía un pasillo que conducía hacia su habitación con su baño, dos habitaciones más, otro baño y la cocina al final del pasillo.

Laia se tumbó en su cama.

- Ven aquí, señor Mats y sé mi papasito esta noche.- dijo ella soltando una risita.

Me acosté sobre ella mientras que le quitaba su vestido y le besaba el cuello, seguía dándole besos hacia abajo. Ella besaba mi cuello y enredaba sus dedos entre mi pelo.

lunes, 29 de septiembre de 2014


                        Sube la temperatura

                                            Capítulo 45

*Siento subir tan tarde, pero los lunes siempre tengo muchos deberes y que estudiar :c Espero que os guste este capítulo 45 y ya estoy empezando a escribir la novela de Erik Durm!! Besos <3*

Llegó el día 25. Era el día en el que Mats iba a conocer a mis padres. Estaba nerviosa por cómo ellos le iban a tratar y lo que me dirían a mi en privado acerca de él. A él también se le notaba nervioso.

Narra Mats:

Estaba nervioso, hoy era el día y quería causarle buena impresión a los padres de Laia ya que quería llevarme bien con mis suegros y que ellos no pensasen que yo podía hacerle daño a Laia porque eso era lo impensable para mi, yo nunca le haría daño a la persona que amo. Estaba temblando y sudando. Coloqué mi pelo y me miré al espejo una y otra vez intentando ver que no me había equivocado en nada del vestuario.

Laia se vistió como había dicho el día antes.

Llegamos a casa de los padres de Laia. Era una casa en un pueblo de Madrid, al norte, a pesar de ser verano corría el aire y se estaba bien. Allí ya nos estaban esperando los padres de Laia, Fernando y Alba Fernández y su hermana Marta y su novio Jesús.

- Bueno, este es Mats.- dijo Laia con una amplia sonrisa.

- Es muy guapo.- dijo Marta riendo y guiñándole un ojo a Laia. Ella respondió con una sonrisa y recogiéndose un mechón de pelo detrás de su oreja ya que éste caía sobre su cara.

Laia llevaba el pelo suelto y algo ondulado. Ella no tenía el pelo realmente liso, en su pelo se formaban algunas ondas que hacían su pelo aún más bonito.

Jesús puso cara de enfado.

- Pero yo te quiero a ti, amor. Si no es amor, ¿por qué llevaría contigo 7 años?

Marta besó a Jesús y a él se le cambió la cara.

Levanté la mano saludándoles y dije con un hilo de voz:

- Hola.

- Es un poco tímido y está nervioso.- dijo ella.

Yo asentí con la cabeza.

Todos en la familia de Laia hablaban inglés por lo que nos pudimos entender perfectamente en inglés, si yo tenía alguna duda yo hablaba con Laia en alemán ya que ella hablaba alemán y si alguien de su familia tenía alguna duda, hablaban entre ellos español, yo estaba intentando aprender español, pero a penas sabía unas pocas palabras y me costaba mucho entenderlo.

Marta, la hermana de Laia intentaba que yo me sintiese a gusto haciéndome preguntas sobre fútbol, aficiones, etc. Con el cuñado de Laia, Jesús, hablaba sobre fútbol, varios jugadores, varias ligas y varios equipos. Los padres de Laia seguían la conversación, su padre alguna vez interrumpía para hacer algún comentario y me sonreían.

Marta tenía el mismo pelo que su hermana pero algo más claro, los ojos más oscuros, no eran color miel y la bonita sonrisa de su hermana, ellas dos se parecían mucho y podían pasar por gemelas ya que se llevan 1 año. El padre de Laia, tenía el pelo canoso, pero Laia me contó que él antes tenía el pelo moreno como Laia, tenía los ojos color miel. Laia había sacado los ojos de su padre. La madre de Laia tenía el pelo rubio y los ojos color café. Los ojos de Marta eran de su madre y el pelo de Marta era una mezcla entre su padre y su madre. Las dos habían sacado la bonita sonrisa de su madre.

- Este estofado está buenísimo.- dije sonriente.

- Lo ha cocinado mi padre, es su especialidad.- dijo Laia cogiéndome la mano.

Miré sus ojos color miel. Cada día me tenían más enamorado.

- Mi marido cocina muy bien.- dijo Alba.

- A mi también me gusta cocinar, pero no soy tan bueno.- dije sonriendo.

Laia me miró a los ojos y sonrió.

- Aún no me ha cocinado nada, pero espero que pronto lo haga y que pueda dar mi valoración.- pronunció ella aún sosteniendo mi mano y mirándome a los ojos.- Estoy feliz por irme a Dortmund.- dijo ella.

- Es algo precipitado, pero si te hace feliz.- dijo Fernando.

- ¿Hablaste con la cadena?- preguntó Alba.

 - Sí, ellos me buscarán un sustituto para cubrir la actualidad del Madrid, todos están deseando hacerlo. Además, ellos estaban esperando que alguien cubra la actualidad del Borussia y están encantados de que lo haga yo, en Dortmund tendré una segunda casa, está todo preparado, la cadena para dar la información sobre el Borussia, el plató, los cámaras, no viajaré con el equipo ya que eso lo hará otra compañera, yo trabajaré dando la información del Borussia los días que juegue con las imágenes, entrevistas y demás que hagan mis compañeros en el estadio del Borussia, Signal Iduna Park y en el resto de estadios en el cual juegue el Borussia.

- ¿Y dónde vivirás?- preguntó Fernando.

- La cadena me ha facilitado sitios donde yo pueda vivir y he elegido una casa que está a 10 minutos en coche de la casa de Mats, 20 minutos andando y pagaré un alquiler hasta que decidamos vivir juntos. Si me pasa algo, siempre tendría a Mats muy cerca y pasaremos la mayoría de nuestro tiempo libre juntos, dormiremos juntos casi siempre, no hay ningún problema.- respondió ella.

- ¿Y ya, ya habéis hecho, bueno, cosas en la cama?- preguntó Alba.

Ella rió y yo solté una risa tensa.

- ¿Y tú qué crees?- preguntó ella.

- Que sí.- dijo su madre.

Ella asintió con la cabeza y rió. Yo sonreí intentando no parecer tenso. Su padre me miró con mala cara como diciendo: ten cuidado con lo que haces con mi hija.

- No asustéis a Mats, yo quise, él no me obligó en ningún momento.- dijo ella.

- No voy a meterme en vuestras intimidades, pero espero que no haya ningún problema de ese tipo y que siempre puedes confiar en nosotros y si pasa algo en Dortmund, nos lo dices y te envíamos dinero para volver.- dijo Alba.- También intentaremos ir a verte y a ver si puedes venir a vernos. Igualmente está el skype.

- No pasará nada y si ella quiere volver con vosotros, tiene total libertad de hacerlo, yo no me enfadaré, seguiré queriéndola y manteniendo una relación a distancia y le pagaría el viaje de vuelta.- dije sonriendo.

Empezaba a relajarme.

- De todas formas yo tengo dinero ahorrado y si empiezo a trabajar allí, tendré más dinero por si acaso ocurre algo.- sonrió.- Sí, hablaremos por skype.

domingo, 28 de septiembre de 2014



¡Y ahora el post de gifs y fotos!

Espero que los capítulos en Fiji os hayan gustado, para mi es donde más se conocen y donde cada uno sabe los puntos fuertes y débiles del otro :3

Foto de Laia en Madrid:

Lo explico después en la segunda temporada, pero os lo explico ahora también jaja Espero que recordéis que el pelo natural de Laia es moreno casi negro y que para irse a Fiji se lo aclaró y se hizo mechas rubias, bien pues al volver a Madrid, que justo es ahora en estos capítulos, ella se corta el pelo pero sigue manteniendo el color más claro y las mechas pero con el pelo más corto, pero no veremos ese cambio hasta las fotos de Alemania ;)


Fotos de Mats:









Fotos de Mats y Laia:




Gifs de Mats:










                        Sube la temperatura

                                        Capítulo 44

*¡Holaaa! Os traigo el capítulo 44, espero que os guste y bueno, si comentáis mejor. Recordar que lo podéis hacerlo en mi ask: criistina18 o en mi twitter: @_myhipsdontlie. Y bueno, desearos un feliz domingo y un buen inicio de semana. A mi me espera una semana movidita, but I can. Besos <3*

El último día en Fiji, el día 24 de Julio tomamos otro desayuno completo como el de los otros días, nos dimos un chapuzón en la piscina para refrescarnos debido al calor que hacía, recogimos todas las cosas, repasamos una y otra vez que no nos faltaba nada, comimos hasta empacharnos para no tener ningún problema de hambre hasta la cena, que en España sería el desayuno, dejamos recogida y limpia la habitación, repasamos de nuevo que no nos faltaba nada y nos fuimos al aeropuerto sobre las 8 de la tarde en Fiji, cuando llegamos allí, facturamos todo y esperamos a que pudiésemos embarcar, nuestro vuelvo salía a las 10 de la noche.

- Ha sido una experiencia increíble a tu lado.- dijo Mats susurrando.

- Al final conseguiste que saliese contigo, traerme de vacaciones y el siguiente paso es irme a vivir contigo a Dortmund.- dije.- Sí, una experiencia increíble.

- Te volví loca.- soltó una risita.

Al aterrizar en España era muy temprano, no habíamos dormido nada en el avión por lo tanto decidimos irnos a mi casa, dejar las maletas como estaban y dormir por un buen rato. Nos despertamos sobre las 4 de la tarde, comimos un poco.

- Mañana es la reunión con tus padres, tu hermana Marta y su novio Jesús, ¿no?- preguntó Mats.

Asentí.

- ¿Tengo que ponerme guapo?- preguntó él.

- Guapo ya eres, solo tienes que ponerte elegante.- le guiñé un ojo.

- Mañana voy a ser lo más respetuoso y amable posible.- dijo él.

- Si eres igual que como eres conmigo, quitando tu parte provocativa y arrogante, triunfarás.- dije sonriendo.

Salí con Mats a dar una vuelta Madrid, por Callao, por Gran Vía, tomamos un helado, estuvimos también por Sol, poca gente pudo reconocerle ya que en Madrid la gente va a su rollo y no va mirando a la gente que tiene al lado, tampoco se esperaban que estuviese en Madrid, solo le reconocieron cuando nos parábamos a hacernos fotos o cuando nos paramos a comprar el helado y varias prendas de ropa para mi. Además de un pantalón de vestir y una camisa para Mats ya que en su maleta no tenía ropa de vestir. Fuimos a casa a probarme de nuevo la ropa que compré.

El primer vestido que me probé era completamente blanco, de tirantes, con escote en la espalda y encaje pero tenía una tela blanca debajo para que no se transparentase nada.

- Ese te queda muy bien, para mañana sería perfecto ya que es una comida.- dijo Mats probándose su pantalón y su camisa.

- Así que sabes de moda.- dije.

- Un poquito. No me preocupo mucho por ir a la moda, pero algunas cosas las sé.- dijo él.

- Unos tacones finos de color marrón, no muy altos, un bolso marrón clarito y pulseras en rosa o azul y ya destaco algo el vestido.- dije besando sus labios.- Te queda muy bien el pantalón de color negro y la camisa azul clarita.

- Es lo que tiene ser tan atractivo, todo te sienta bien.- rió.

- No te lo creas tanto

Agarró mi cintura y me besó.

Mientras que él se ponía ropa cómoda para estar por casa, yo cogí otro vestido que me había comprado para probármelo.

- Pasado mañana para quedar con Koke y Natalia, te pones un pantalón vaquero y una camisa de manda corta en blanco o un color clarito, unas deportivas y listo.- dije sonriéndole.

El vestido que me probé ahora era ajustado en la parte de arriba, de palabra de honor y holgado en la parte de abajo, de color rosa muy clarito en la falda y la parte de arriba con un estampado en flores.

- Ese te queda mejor que el otro incluso.- dijo Mats.

- Este me lo pondré para quedar con Koke y Natalia, unas cuñas en blanco, un colgante dorado finito , una pulserita de un color discreto y un bolso en blanco.- dije guiñándole un ojo a Mats.

- Perfecta.- me lanzó un beso.

Reí.

Me probé el último vestido, de color agua mar, de tirantes, totalmente holgado, la parte de atrás más larga que por delante, era de gasa el vestido.

- Este vestido necesita unos zapatos finitos de color blanco, pulseras doradas y un bolso en blanco. En sí el vestido destaca mucho por su color.

Mats asintió.

- A este paso te haces experto en moda.- dije riendo.

- Veo que te gusta la moda.- dijo él.

- No me apasiona, pero digamos que me gusta vestir bien, tampoco rechazo cosas de otras temporadas, no llevo siempre lo que se lleva, llevo lo que me gusta y me hace sentir cómoda combinándolo lo mejor que sé.

sábado, 27 de septiembre de 2014


¡Y ahora las fotos!

Fotos de Laia en Fiji:




Fotos de Laia y Mats en Fiji:



Fotos de Mats:










                       Sube la temperatura

                                                         Capítulo 43 

*¡Holaaa! Voy a irme en cero coma xd Así que os subo el capítulo 43, espero que os guste y ahora os subo post de fotos. Si tenéis dudas o si queréis comentar algo conmigo, ya sabéis. Besos <3*

Comimos en el barco algo de fruta, avena, empanadas y poco más ya que no pudimos traer nada cocinado como carne o pescado. El hotel se había molestado mucho en tener comida mediterránea para nosotros al igual que varios chiringuitos y bares de la zona, pero no solo para nosotros si no para varios turistas mediterráneos que vinieron durante estos días.

Tras acabar el paseo en barco, volvimos al hotel. Yo estaba ansioso porque sabía la gran sorpresa que le esperaba a Laia, se lo debía después de cumplir un mes.

Narra Laia:

Al abrir la puerta de la habitación noté que olía como a rosas, me resultaba raro, la habitación nunca olía así, estaba perfumada de otro modo, pero al pisar los pétalos de rosa roja sabía por qué olía así, habían perfumado la habitación para la ocasión y decorado para lo mismo. Había un camino de rosas hasta la cama, en ella había sábanas de seda blanca y un picardías muy sexy encima de la cama, el picardías era de color rojo, sobre la cama caía una tela blanca también de seda y el cabecero tenía unos lazos en color rojo. En las mesillas había unas velas perfumadas, lo que hacía que la habitación oliese así.

- Hoy, este es nuestro templo del amor.- dijo Mats en un susurro por detrás de mi.

Me giré y le vi ahí, de pie, con las manos en el bolsillo, el pelo alborotado, como tanto me gustaba a mi y sonriendo de oreja a oreja.

- ¿Cuándo lo has preparado?- pregunté.

- La idea ha sido mía, pero quiénes lo han preparado han sido las asistentas del hotel.- contestó él.- Póntelo.- dijo señálando con la cabeza el picardías.

Me sonrojé.

- Rojo, para encajar perfectamente con el decorado.- dije riendo.

- Pero la diferencia es que tú no eres decorado, tú eres la protagonista en esta noche.

- Por nuestro primer mes, ¿cierto?- pregunté.

Él asintió.

Fui al baño y me quedé con la boca abierta, también habían llenado el jacuzzi, le habían puesto espuma, algunas velas y pétalos de rosas.

- Póntelo, sales para que te vea y al jacuzzi.- dijo él guiñándome un ojo.

Me puse el picardías. Estaba alucinando con la idea tan romántica y picantona que había tenido Mats.

Salí del baño para que me viese y en cuanto me vio, su amiguita se excitó. Solté una pequeña risita. También llevaba unos tacones puestos. Caminé por la habitación intentando parecer una modelo.

- La primera vez que te vi en persona pensé que perfectamente podrías ser una modelo, la tercera vez en aquella entrevista al verte marchar me lo pareciste aún más al verte marchar desfilando.- dijo él.

- Yo nunca desfilo.- dije.

- Tú crees que no, pero lo haces sin darte cuenta.- dijo él levantándose y acercándose a mi.

Me apretó contra su cuerpo. Sentí a su amiguita acechar y no pude evitar soltar una risita. Nos desnudamos mientras íbamos camino del jacuzzi. Nos metimos los dos juntos y me coloqué encima de él. Él y yo fuimos uno entre la espuma que había en el jacuzzi. Después de disfrutar en el jacuzzi fuimos corriendo hasta la cama donde seguimos con nuestros jueguecitos. Clavé suavemente mis uñas en su espalda, reí y el rió. Éramos uno entre tanto placer.

Narra Mats:

Desperté después de la mejor noche de mi vida y allí estaba ella, dormida, acaricié su pelo y ella se despertó, lo primero que dijo fue:

- La mejor noche de mi vida, sin duda.

Sonreí mientras que seguía acariciando su pelo.

- La mía también.- pronuncié.

- Gracias, ha sido maravilloso.- dijo ella.

- Gracias a ti.- dije yo besando sus labios.

- Te quiero.- dijimos los dos a la vez y reímos.

Me quedaba menos de un día para terminar las vacaciones en Fiji. Disfruté de este día muchísimo. Primero desayunamos, lo hicimos de nuevo con la pasión que conteníamos de la noche anterior, fuimos a darnos el último baño a las aguas cristalinas de Fiji, nos besamos una y otra vez en ese precioso mar, comimos y de vuelta al agua, nos besamos una y otra vez, jugamos con las olas, buceamos a poca profundidad, vimos algunos peces de colores y corales, algún caballito de mar, vimos la puesta de sol de Fiji por última vez, nos besamos mientras que el sol se escondía, cenamos en el restaurante del hotel y volvimos a perdernos una vez más entre la oscuridad que inundó Fiji. Esta vez era la última vez que nos perdíamos entre la noche de Fiji.

Narra Laia:

Mats nada más levantarse, llamó a su representante para saber que pasaba en Alemania y le dijo que por ahora Caty no se había pronunciado, pero que los medios sí y que habían dado por bueno nuestro mensaje y que no creían las palabras de Caty y si las nuestras, las cuales si eran verdaderas.

viernes, 26 de septiembre de 2014


Hoy os traigo unas pocas fotos ya que ayer subí bastantes :)

Foto de Laia en Fiji:


Fotos de Mats:











                        Sube la temperatura

                                                            Capítulo 42 

*¡Holaaaaaaaaa! Hoy subo el capítulo antes porque esta tarde me voy jaja Es el capítulo 42, espero que os guste, que os esté gustando la historia y recordar que podéis comentar cualquier parte de la novela, cualquier duda o lo que sea en mi ask o twitter que están a la derecha. Besos <3*

Llamé a mis padres. Cogió el teléfono mi madre.

- ¿Qué tal?- pregunté.

- Bien- respondió ella.- ¿Y tú?

- Bien, estamos aún en el hotel, ahora iremos a dar una vuelta.

- Pásalo bien, por cierto nos quedamos más tranquilos con la foto que nos mandó Natalia que subió Mats a twitter. Feliz primer mes cariño de parte de tu padre y mía.

- Gracias, estamos muy felices.- dije.

- Te paso a tu padre.- dijo ella.

Se puso mi padre al teléfono.

- Me alegro por el primer mes. Espero que ese chico te cuide tanto como dices tú.- dijo él.

- Sí, papá, lo hace. Oye, el día 24 volvemos a Madrid y el 25 será la reunión, ¿sí?

- Vale, le diremos a tu hermana y a su novio que vengan para que conozcan a Mats. Por cierto, la foto es muy bonita y se os ve enamorados.

- Lo estamos.- dije esbozando una sonrisita.

Le conté a mi padre lo que ocurrió con la ex de Mats y cómo lo estábamos pasando.

- Dile a Mats que no se preocupe, su representante se ocupará de todo y le dirá que hacer en cada momento.- dijo él.

Me despedí y colgué.

Le comenté a Mats lo que me había dicho mi padre.

- Tu padre tiene razón.- me besó.

Mats y yo contratamos un curso de submarinismo para poder ver más adentro del mar donde ya habíamos buceado un poco días antes. Llegamos al hotel algo cansados pero eso no fue problema para que no acabásemos siendo uno en la cama.

Los rayos de sol entraron por el gran ventanal que había en la habitación. Abrí poco a poco los ojos y allí estaba él, dormido plácidamente. 22 de Julio, nos quedaban menos de 2 días para disfrutar de Fiji.

- Amor, despierta.- dije susurrando en su oído.

- Me encanta oír tu voz despertándome.- dijo él aún con su voz adormilada.

- A  mi me gusta despertarte.- dije besando su mejilla.

Me incorporé un poco y el pasó su brazo alrededor de mi cintura.

- Te quiero.- le susurré al oído.

- Te quiero.- dijo él mirando fijamente mis ojos color miel.

Eso hizo que me ruborizase.

- Me encanta cuando te sonrojas.- esbozó una sonrisita y cerró un poco los ojos porque los rayos de luz que entraban por el gran ventanal le molestaban un poco.

Revolví su cabello un poco más de lo que ya estaba y él sonrió apretándome contra él.

- Que ganas de que te vengas a Dortmund y poder dormir algunos días junto a ti, sin presiones está claro.- dijo él.

- Sé que es sin presiones. Dormir algunos días juntos en tu casa o en la mía será bonito. No romperemos la magia ni tampoco habrá agobios. Tampoco sentiremos que nuestra relación va muy lenta.- sonreí mientras recogía mi pelo en una coleta.

Él besó mi nariz, un gesto tierno.

- Me encanta cuando tienes gestos tan tiernos conmigo.

- Me encanta cuando te comportas tan natural conmigo, haciendo tus cosas diarias sin preocuparte en lo que pensaré, eres tú misma y eso es lo que más especial te hace.- me besó en los labios tiernamente.

- ¿Qué haremos hoy?- pregunté.

- Paseo en barco.- respondíó él.

Narra Mats:

Cogimos todas las cosas para nuestro paseo en barco. Deje encargadas a varias asistentas del hotel que arreglasen la habitación para cuando Laia y yo volviésemos del paseo en barco. Quería darle una sorpresa y sabía que le iba a gustar.

Desayunamos en el restaurante del hotel un desayuno bastante completo: cereales, frutas, tostadas, zumo de piña y café.

Nos fuimos al barco y vimos como era la costa, pequeñas islas que rodeaban a la isla Viti Levu que era la isla donde nosotros nos encontrábamos. También vimos peces nadar por el agua ya que el agua era bastante cristalina.

- ¿Lo estás pasando bien?- le pregunté a Laia.

- Fenomenal.- dijo ella agarrando mi cara y besándome.

jueves, 25 de septiembre de 2014


¡Os traigo fotos y gifs! ¡Espero que os este gustando hasta ahora la novela! <3

Foto de Laia y Mats en Fiji:


Fotos de Mats:






Fotos de la playa de Fiji:




Gifs:








                          Sube la temperatura

                                    Capítulo 41 

*¡Holaaa! Lo subo un poquito tarde, lo siento. Es que estoy avanzando cosas con respecto a la semana que viene y mandan un montón de cosas, pufff. Pero ya estoy aquí y os traigo el capítulo 41. Espero que os guste :3*

Mats y yo volvimos al hotel. Me puse encima de él, coloqué sus manos sobre mi culo y empecé a hacer pequeños movimientos encima de su amiguita, Mats soltó una pequeña risita y me quitó la camiseta acariciando mis pechos. Reí. Poco a poco el placer nos envolvió y nos perdimos entre la oscuridad que inundó Fiji.

Al despertar Mats ya se había levantando y estaba tumbado en el sofá leyendo un libro en alemán ya que él había traído sus libros en alemán e inglés y yo los míos en español e inglés. Los libros del hotel no nos gustaban y la tele no la queríamos ver ya que queríamos alejarnos de todo lo relacionado con el resto del mundo.

- Buenos días señor Mats.- dije abrazándole por detrás.

Ya era 20 de Julio.

- Buenos días, señorita Laia.- se giró y me dio un suave beso en los labios. Sonreí mientras me besaba.- ¿Quieres desayunar algo?- preguntó él.

- Dentro de un rato.- dije sentándome en el otro sillón.

Él sonrió.

- ¿Qué lees?- pregunté.

- El diario de Ana Frank.- respondió él.

- Es un libro que tenía pensado leer.- sonreí.

- Es triste, pero dicen que merece la pena para saber todo lo que ocurrió con ella y su familia, la desgracia que les pasó a esas personas.- dijo él.

Asentí.

Me quedé observándole un rato. Como pasaba cada página con delicadeza, como sus ojos iban leyendo cada palabra, como su cara iba cambiando según pasaban las páginas, como se colocaba el pelo si éste le caía sobre la frente.

- Ya sé que soy muy guapo, no hace falta que me mires tanto.- dijo Mats con su típica sonrisita.

Arrogante cuando lo tenía que ser.

- Sabes que eres extremadamente irresistible y no puedo dejar de mirarte.- dije soltando una pequeña risita.

Se levanto del sofá dejando marcada la página por donde se había quedado y me cogió en brazos, enredé mis piernas en su cadera, besó mi cuello, yo besé el suyo.

- Ya he decidido lo que quiero desayunar, a ti.- dije esbozando una sonrisita.

- Soy el mejor desayuno que puedes tener.- besó de nuevo mi cuello.

Apreté mis piernas alrededor de su cintura para acercarme a su amiguita. Estaba excitada. Él rió. Me tumbó sobre el sofá. Nos desnudamos poco a poco hasta quedar totalmente desnudos. Miro mi cuerpo y esbozó una sonrisa.

- Solo yo tengo la suerte de disfrutarte.

El resto del día lo pasamos en la playa y comimos allí, también cenamos allí.

Llegó por fin el día 21 de Julio. Mats estaba ansioso.

- ¿Dónde nos haremos la foto?- preguntó él.

- En cualquier sitio, que sea natural, que se note que nos queremos y que no queremos ser la pareja perfecta.

- Me parece bien.- sonrió.

Finalmente nos hicimos la foto sentados en el sofá, Mats rodéandome con sus brazos mientras me daba un beso en la mejilla y yo riéndome. Mats la subió a twitter y escribió: “feliz primer mes amor, que sean muchos más y le doy gracias a Brasil no solo porque allí gane el mundial si no porque conocí a una persona increíble”

Yo como también tenía twitter le di RT y escribí: “feliz primer mes a ti también amor, como tú dices ojalá sean muchos más, también le doy gracias a Brasil por la increíble experiencia de vivir un mundial tan de cerca y de conocerte”

Mats le dio RT al tweet que escribí.

El representante de Mats le llamó.

- Me ha dicho que ha sido perfecto, que lo hemos hecho muy bien y que seguro que esto hace callar a Caty hasta que ella decida empezar a contar las intimidades que tuve con ella como pareja pero entonces la denunciaré porque ella firmó los papeles de no contar ninguna intimidad acerca de mi y seguro que un juez nos da la razón si ella decide contarlo pasándose los papeles por… ya sabes.- dijo Mats.

Reí por lo último.

- ¿Ya estás más contento?- pregunté.

- Sí, mi representante me ha dicho que me llama si pasa algo.- respondió él.

- Ahora a disfrutar.- dije.- Pero antes voy a llamar a Natalia y a mis padres.

Llamé a Natalia:

- ¿Mis padres ya se van fiando de Mats?- le pregunté.

- Poco a poco.- respondió ella.

- Sigue así, Natalia.- dije.

- De momento están tranquilos porque les mandé la foto que Mats acaba de subir y que por las palabras parece enamorado, con eso se quedaron más tranquilos.- dijo ella.

- Menos mal. ¿Y tú y Koke?- pregunté.

- Seguimos en Ibiza, ya pasado mañana volvemos a Madrid, lo estamos pasando bien.

- Nosotros volvemos el día 24 a Madrid, un día después que vosotros, el 25 iremos a ver a mi padres y a mi hermana con su novio, si quieres el 26 quedamos.- dije.

- ¡Sí! ¡Qué llevo mucho tiempo sin verte!- exclamó Natalia.

- Tengo que dejarte, tengo que llamar a mis padres.- dije.

Me despedí y colgué.

miércoles, 24 de septiembre de 2014


¡Ya estoy aquí de nuevo! Os traigo fotos, espero que os gusten.

Foto de Laia en Fiji:


Fotos de Mats: